La Historia de Calama aún contiene lagunas, producto de la lejanía de muchas fuentes documentales. El período colonial y boliviano se encuentra documentados en Sucre, Bolivia.
Recién en 1888, bajo el gobierno de José Miguel Balmaceda, Calama se vuelve un centro administrativo de 3º orden, al inaugurarse el municipio (13 de Octubre). Previo a ello, en 1886, fue inaugurada la estación ferroviaria del Ferrocarril Antofagasta - Bolivia, la cual agilizó más todavía el paso de cargas por Calama; todo esto hizo denotar la tendencia descentralizadora del presidente Balmaceda, quien fue el primer presidente chileno en visitar esta ciudad que ya superaba los 1.000 habitantes en ese período.
El siglo XX significó para Calama el sellar su destino como la Capital Minera de Chile, proceso que se comenzó a labrar con el inicio de faenas en el yacimiento de cobre de Chuquicamata (1915). Administrativamente, Calama volvió a ser un centro administrativo de 2º orden, al decretarse bajo el gobierno de Arturo Alessandri Palma la formación del Departamento de El Loa. Masivas oleadas de población, provenientes en su mayoría de la actual IV Región de Coquimbo, llegaron a trabajar y a poblar el campamento minero más grande de la Historia de Chile; esta población ha sido trasladada, gradualmente, hasta el día de hoy, desde la década de 1960, con la construcción de las primeras villas de mineros en la ciudad de Calama.
En 1951 las aguas del río Salado, afluente del Loa, fueron desviadas, pues impedían el pleno desarrollo agropecuario del oasis. Es en estos tiempos en los que surge el primer clamor ciudadano por que El Loa llegue a ser provincia (equivalente a las actuales regiones de Chile), encabezados por Alejandrina Olivares; esto, para reivindicar los recursos que dentro de la actual Provincia de El Loa se producen para el bienestar económico del país, los cuales contrastan con la realidad de abandono y falta de progreso para todos los calameños, que hasta hoy perdura. Producto de ello, bajo el 2º gobierno de Carlos Ibáñez del Campo (1955) se decretó que los municipios mineros cobraran a las empresas mineras bajo su jurisdicción el 5% de las ganancias que generaran del cobre, lo cual fue algo de ayuda a la alicaída realidad calameña; a esto se sumaron las gestiones de los senadores Pablo Neruda y Radomiro Tomić (máximo político chileno nacido en Calama); con la Nacionalización del Cobre, bajo el gobierno de Salvador Allende Gossens, este aporte aumentó.
Pero al comenzar el gobierno de la Junta Militar de Gobierno fueron cortados todos estos beneficios (1974). Ese mismo año, la Caravana de la Muerte, aparato de represión de disidentes ocupado por la Junta, pasó por Calama, cosechando 26 ejecutados, entre dirigentes sociales y militantes de izquierda, para posteriormente retirar los cadáveres de la fosa común que hicieron en la Pampa de Moctezuma y arrojarlos al mar, según investigaciones mandadas a hacer años después por el presidente Ricardo Lagos Escobar.
La Junta le traspasa toda la autoridad al general Augusto Pinochet Ugarte, quien en su gobierno reforma la división administrativa del país. A pesar de este cambio, Calama sigue conservando su categoría de centro administrativo de 2º orden, con el reemplazo nominal de departamento a provincia.
En medio de tanta tensión política y social que se respiraba en el ambiente, nace el 7 de enero de 1977 el Club de Deportes Cobreloa, desde siempre uno de los protagonistas del campeonato profesional de fútbol chileno, y que desde sus inicios ha sido más que un equipo de fútbol, la alegría y el orgullo de la ciudad, en medio del abandono que sienten sus habitantes por parte del gobierno chileno, que aún es de carácter centralista.
El retorno a la democracia significó volver a algo de auge, gracias a diversas reformas en cuanto a la autonomía del manejo de los municipios en Chile, siendo el primer alcalde de este período don Edwin Rowe Molina, quien tras más de 10 años en el municipio, es destituido de su cargo en medio de una gran polémica, pues los problemas tributarios y de tesorería que presentaba el municipio contrastaban con los amplios avances de infraestructura y de gestión logrados en su período; esto dividió profundamente a la opinión pública calameña por un tiempo. Después de varios interinatos, tras las elecciones municipales del 2004, Arturo Molina Henríquez asume la alcaldía, triunfando sobre Nalto Espinoza Hurtado, un ex-alcalde que postula por un nuevo periodo. En octubre del 2008, Molina pierde las elecciones y asume Esteban Velásquez Núñez, profesor de la ciudad y ex concejal y alcalde subrogante en el 2001. Mientras su campaña se caracterizó por su independencia partidista y su lema "Calama Primero", la de Molina sufrió desbandes de sus propios compañeros de coalición, en medio de escandalosos antecedentes en contra del ex-alcalde y su gestión, que dejaron al municipio con una deuda superior a los 80 millones de pesos. Lo irrisorio para la comunidad fue, a meses de ganada la elección por Velásquez, la designación por parte de la presidenta Michelle Bachelet Jeria de Rubén Rojo como Gobernador Provincial, aun cuando él estuvo involucrado en la escandalosa gestión de Molina, al ser director de la Corporación Municipal de Cultura y Turismo.
El siglo XXI se ha caracterizado por un creciente fervor popular por reivindicar la dignidad de Calama y la Provincia de El Loa ya que esta área geográfica es deficitaria, aporta al estado mayor beneficio del que recibe del mismo, lo cual se ve reflejado en el ambiente y la infraestructura urbana y vial de la ciudad (por nombrar algunos factores), lo cual ha motivado la unión de Calama con el resto de las comunas de las provincias de El Loa y Tocopilla para impulsar la concreción del proyecto El Loa Región, que viene a retomar las movilizaciones encabezadas a mitad del siglo XX por Alejandrina Olivares. Importancia también ha tenido en la comuna la reivindicación de derechos de los estudiantes secundarios a una educación de mejor calidad y a que la Capital Minera de Chile posea su propia universidad estatal, agrupados en diversas colectividades, estos movimientos se sumaron a la Revolución de los pingüinos, que a nivel nacional agrupó a estudiantes de todos los niveles y los movilizó a niveles de convocatoria y peso popular no vistos desde el gobierno de Augusto Pinochet Ugarte.
excelente BLOG y muy buena información sobre la ciudad Felicitaciones ! :)
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